El ritmo de las plantas es lento: crece con paciencia y amor. Entrar en el Jardín Botánico es como si fuéramos trasladados a un nuevo reino. Aquel amontonamiento de seres libres. El aire que se respira es verde. Y húmedo. Es la savia que nos embriaga...
2019-02-24T03:47:38+01:00